Bien dice el dicho que hay algo para lo que nadie está preparado y es para los gemelos. Ese par de bebés que nacen en conjunto y que ponen de cabeza a sus padres, pues si tener y criar un hijo es difícil, hacerlo por partida doble lo es aún más, ante esto no hay nadie que diga lo contrario. Ahora, piensa algo sobre esto, imagina cuando llegan al mundo un par de estos y al crecer deciden tener un acuerdo mutuo que los vuelve misteriosos y a la vez escalofriantes. Pues este fue el caso de las Gemelas Silenciosas.
June y Jennifer Gibbons nacieron un día de abril del año 1963 en la isla de Barbados, siendo hermanas Gemelas idénticas que vinieron al mundo con tan solo 10 minutos de diferencia. Estando todavía pequeñas, las niñas viajaron con sus padres a Gales, en Reino Unido, ya que los mismos deseaban una mejor vida para toda su familia. Este momento de cambio en su vida marcó un antes y un después en la vida de las gemelas, pues se vieron en un nuevo mundo en el cual no podían estar separadas la una de la otra, pero a la vez no disfrutaban su tiempo juntas.
Ante esta terrible situación que se encontraban las hermanas, parecía que sólo la muerte de alguna de las hermanas parecía ser la única respuesta o solución. Y así ocurrió…
Los primeros años de las Gemelas en el mundo fueron años difíciles puesto que eran 2 niñas negras provenientes de un territorio colonial, por lo que era muy menospreciadas por diferentes sectores de la sociedad británica, desde temprana edad comenzaron a sufrir de racismo y discriminación por parte de otros niños. Ante este rechazo excesivo, sus padres comenzaron a notar algo que causó mucho temor en ellos, Las Niñas No Hablaban. Este terrible problema de intensas burlas de las que eran víctimas llevo a las hermanas a establecer una especie de Pacto de Supervivencia.
Esto fue lo que declaró June Gibbons en una entrevista que dio tiempo después: “Dijimos que no íbamos a hablar con nadie más. Dejamos de hablar con todo el mundo. Sólo conversábamos entre las 2 en nuestro cuarto, a solas”. Esta situación generó una enorme preocupación entre sus padres y tutores, por lo que las llevaron a consultas con varios médicos para que fueran tratadas por sus supuestos “problemas psicológicos”, pero nada de esto sirvió de nada. Probaron separando a las hermanas una de la otra para ver si se desenvolvían bien de forma individual, esto tampoco sirvió.
Lo que habían acordado las hermanas silenciosas entre ellas trascendía todo obstáculo impuesto, toda terapia de lenguaje que les hicieron, nada se interponía entre ellas y su pacto de silencio, habían creado una forma de lenguaje entre ellas que sólo ellas entendían. Cuando June dio la entrevista comentó que las ideas de Jennifer eran muy extrañas pero funcionaban para ambas: “Su idea era que un día, ella se despertaría y sería yo, y un día yo me despertaría y sería ella”.
Este pacto de silencio se rompía solamente mediante la escritura, tenían apenas 18 años y ambas ya habían escrito 3 novelas, pero su obra literaria de mayor valor fue una especie de diario en el que iban relatando los registros de sus pensamientos más íntimos, esta era su forma de expresar todo aquello que hacía ruido en sus mentes pero que sus bocas callaban. Después de un tiempo las gemelas empezaron a llevar su lenguaje a una serie de prácticas ilícitas, como la noche en que fueron capturadas mientras intentaban incendiar una escuela local, las autoridades se sorprendieron de observar que en sus diarios relataban muchos más actos delictivos.
La historia de las hermanas fue evaluada por varios expertos y especialistas psiquiatras mientras ellas estaban en un centro de detención debido a sus actos delictivos, hasta que finalmente fueron diagnosticadas con el trastorno de personalidad psicótica, como acto seguido fueron recluidas a un centro medico psiquiátrico en el que cumplieron 12 años de reclusión, hasta que por fin alguien se ganó la confianza de las gemelas y le confiaron su mayor secreto, habían decidido que una de ellas debía morir y sería Jennifer. El lazo se rompería al morir una de ellas, así que la otra debería hacer una vida normal, deseaban romper ese lazo, querían ser libres finalmente.
Y así, un 09 de marzo de 1993, las gemelas Gibbons quedan libres de su círculo vicioso y tóxico mediante la muerte por infarto de Jeniffer, no hubo ningún informe que dijera que fue provocado, era totalmente natural y finalmente June recibía su dulce liberación. Así terminó la historia de estas hermanas que causó tanto revuelo a nivel mundial.
Las gemelas Gibbons eran hermanas gemelas monocigóticas, lo que significa que se desarrollaron a partir del mismo huevo fertilizado y comparten el mismo material genético.
A pesar de que se comunicaban principalmente entre sí durante su infancia y adolescencia, las gemelas Gibbons hablaban con fluidez el inglés y el galés.
Durante su internamiento en un hospital psiquiátrico, las gemelas Gibbons desarrollaron su propia forma de comunicación basada en gestos y sonidos guturales.
Las gemelas Gibbons escribieron varias novelas durante su internamiento en el hospital, incluyendo "The Silent Twins" y "Pleasure".
La historia de las gemelas Gibbons ha sido objeto de mucha atención por parte de los medios de comunicación y ha inspirado varias obras de ficción y no ficción, incluyendo el libro "The Silent Twins" de Marjorie Wallace y la película "Twinsters" de Samantha Futerman y Anaïs Bordier.
¿Conocías la historia de las hermanas?
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