La Bóveda del Fin del Mundo, uno de los sitios más seguros del planeta.

El fin del mundo en un tema que le roba el sueño a cualquiera que se detiene a pensarlo porque la verdad es que no sabemos cuando ha de suceder, solo lo que suelen decir las personas religiosas al respecto, de que será muy pronto y que será espantoso. En los últimos años esta teoría de que el fin del mundo se acerca a tomado muchísima más fuerza después de todos los sucesos que ocurren cada vez más, pandemias, guerras, cambio climático, etc, todo ello nos está colocando en una situación de miedo que nos hace reflexionar respecto al rumbo que están tomando nuestras vidas y las acciones que se toman en el planeta.

Lo que si es casi seguro es que en cualquier momento podría suceder en mega cataclismo que azote a nuestro planeta y por lo tanto el mundo debe estar preparado para que si quedan sobrevivientes del mismo, se pueda garantizar su supervivencia luego del mismo con lo necesario para poder volver a sembrar y cosechar. Es por ello que en febrero del año 2008, el Ministerio Noruego de Agricultura y Alimentos decidió adelantarse ante cualquier situación y creo la Bóveda del Juicio Final, la cual se encuentra localizada en el corazón del hielo Ártico, más específicamente en el archipiélago de Svalbard, en la misma Noruega.

Un edificio preparado para el fin.

Se trata de un edificio apocalíptico que cumple la función de un enorme depósito en el cual se guardan más de un millón de muestras de semillas. La última vez que la Bóveda se abrió fue el 14 de febrero del año en curso, cuando este Banco Mundial de Semillas recibió un aproximado de 22,000 nuevas muestras enviadas por distintos países y ahora las reservas totales del mismo ascienden a los 1,125,000 semillas de un aproximado de 5,500 especies distintas y también 89 bancos de genes, esto según datos oficiales de la organización a cargo de su administración.

La también conocida Arca de Noeh Vegetal fue construida en el medio de una montaña en el Ártico, a 130 metros sobre el nivel del mar para garantizar que el suelo esté seco. Los ingenieros a cargo de su construcción la diseñaron de esta forma para así evitar cualquier catástrofe y mantener a salvo las semillas, las que se encuentran a una temperatura siempre estable de -18° grados centígrados. Otra de las ventajas de este lugar es que es uno de los sitios del mundo que cuenta con menos actividad sísmica y además el perfecto clima frío de la zona garantiza la seguridad de las semillas aún si se llegarán a quedar sin electricidad.

La misión principal de esta impresionante Bóveda es la de conservar la biodiversidad agrícola de todo el planeta. En ella los más importantes científicos expertos en agronomía conservan semillas congeladas de los más importantes cultivos de todo el mundo con la intención de proteger este material genético de posibles desastres naturales, guerras y otras catástrofes. Como así también, las colecciones sirven a los agricultores y científicos para mejorar genéticamente las plantas y desarrollar nuevas variedades, todo para garantizar la supervivencia del ser humano después de un cataclismo.

Con el fin de reducir al mínimo la exposición de los bancos de semillas al mundo exterior, el gran depósito apocalíptico solo abre unas pocas veces al año y sólo a personal autorizado, por lo que este sitio también es uno de los lugares más seguros y al cual es imposible acceder, es un lugar prohibido de visitar y al que además es súper difícil de acceder por lo complicado de la zona donde se encuentra. En dicho bancos se encuentran todo tipo de semillas que forman parte importante de la dieta básica de todos los países, entre ellos esta el trigo, maíz, frijoles, arroz, sorgo, mijo, entre muchas otras más.