La práctica de hacer ejercicios siempre ha estado muy relacionada con distintos mitos que no hacen más que desinformar a los que están buscando cambiar su estilo de vida por uno más saludable y se encaminan en la ruta fitness. Uno de esos mitos indica que el sudar mucho equivale a quemar muchas calorías y por lo tanto, adelgazar.
Lo cierto es que esta creencia es incorrecta y está lejos de ser exacta. Sudar no significa adelgazar más y esta es una idea errónea que se ha transmitido por muchos años incluso agregando “trucos” que te indican que para sudar más y tener un mejor efecto, es mejor entrenar con mucha ropa puesta o envuelto en ciertas prendas plásticas como bolsas o fajas que no solo no funcionan para quemar grasa sino que también pueden representar un riesgo para la salud.
Por eso, en busca de acabar con ese mito, conoce a continuación los fundamentos para cambiar esa mentalidad y practicar tus ejercicios correctamente.
Debemos dejar en claro que el sudor es el mecanismo que pone en marcha nuestro cuerpo cuando la temperatura corporal se eleva demasiado. Es en este punto que nuestro cuerpo comienza a fabricar el sudor, en un esfuerzo por estabilizar la temperatura. Esto lo hace activando las glándulas sudoríparas, liberando agua con azúcares, sales minerales y productos del desecho o descomposición de la comida, al sudar baja el calor y con ello la temperatura.
Así que, al sudar, no quemas grasas, solo te deshidratas y por eso empiezas a sentir unas desesperadas ganas de tomar agua. Diversas situaciones nos hacen sudar, como los niveles de calor o humedad, pero no todos sudamos de la misma forma ya que esto varía de persona a persona. Entre más grande una persona, más sudara ya que tiene más masa corporal que enfriar. Así que sudar no significa que estés quemando grasa, sino que estás enfriando tu cuerpo.
La verdad es que la grasa no se quema ni mucho menos se derrite, esta se elimina de nuestro cuerpo a través de las células grasas del cuerpo para proveerle energía. El cuerpo humano descompone esa grasa en 2 formas distintas, Ácidos Grasos y Glicerol. Es por eso que cuanta más energía necesitas, más grasa demanda el cuerpo de esas células.
Por supuesto que hay una relación entre sudar y quemar grasa. Si estas haciendo ejercicio de forma intensa, es lógico que la temperatura de tu cuerpo empiece a elevarse y por lo tanto empieces a sudar mucho. Esto no significa otra cosa más que estas empleando mucha energía para tu práctica física y por lo tanto, tu cuerpo está demandando a las células grasas toda la grasa que puedan aportar, consumiéndola para darte energía.
Solo de esa forma es posible que logres “quemar” esa grasa, no envolviéndote en plástico ni usando más ropa caliente o haciendo ejercicio en un lugar que hace mucho calor, sino haciendo el suficiente esfuerzo físico para consumir la grasa de las células.
A pesar de todo lo anterior mencionado, la gente cree firmemente que el sudar mucho en efecto ayuda a adelgazar ya que seguramente al salir de una sudoración excesiva, si te pesas, notarás un cambio en tu peso y lo cierto es que lo que perdiste no es más que líquidos y no grasa, y estos volverán pronto, prácticamente después de haber saciado tu sed.
Así que deja de pensar que usar ropa impermeable o envolverte en bolsas plásticas te ayudará a bajar de peso. Solo una dieta saludable y una adecuada rutina de ejercicios harán un cambio en ti.
Te invitamos a leer nuestro articulo sobre: ¿Por qué duelen los músculos al hacer ejercicio?
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