Ejercicio y Dormir: ¿Por qué es un binomio fundamental en la salud?

Sabemos que el pilar fundamental de una vida saludable es llevar una adecuada y muy balanceada alimentación, una buena rutina de ejercicios y un descanso apropiado, pero sucede y más constante de lo que podría parecer, que las personas subestiman mucho el hecho de descansar correctamente, sin dar importancia a las consecuencias del desvelo en la salud del organismo, las cuales algunas pueden ser muy evidentes, como un exceso de somnolencia diurna o drásticos cambios en el estado de ánimo y el aumento del estrés.

Se sabe también que la falta de sueño repercute a nivel fisiológico, en la habilidad para procesar la glucosa, lo que depara en altos niveles de azúcar en sangre y por extensión, aumenta notablemente el riesgo de desarrollar diabetes o de que aumente el peso corporal. Ahora, buscando el cambiar esta terrible problemática que afecta a un buen número de individuos, el hecho de practicar un ejercicio ayuda de forma notable a elevar los niveles de sueño y mejorar nuestro descanso, algo que ha sido comprobado científicamente.

Entre más ejercicio, mejor dormimos.

El detalle de que al hacer mucho ejercicio mejor duermes va más allá de solo un dicho sino que hay mucha literaria científica que nos demuestra que en efecto, el hacer ejercicio no solo ayuda a estar en forma sino también a tener una mejor calidad del sueño.

Uno de los estudios que demuestra claramente lo anterior dicho es el que fue publicado en el Journal of Clinical Sleep Medicine, el cual esta enfocado sobre todo a mujeres con insomnio. Para el experimento del que derivó el estudio, participaron 11 mujeres que padecían de un trastorno de sueño y que también comenzaron con una rutina de 30 minutos de ejercicios aeróbicos, 3 veces a la semana y en las cuales su sueño mejoro notablemente en un plazo de 16 semanas.

El ejercicio llevado a cabo con regularidad está recomendado siempre, pero por supuesto que no conviene hacerlo de una forma muy intensa si lo realizas al poco tiempo de ir a la cama a descansar. Esto es porque la actividad activa del sistema nervioso simpático realiza un aumento en la frecuencia cardíaca y en general produce un nivel de excitación que hará muy difícil que se puede conciliar el sueño. Sin embargo, esto último no afecta de igual manera a todo el mundo, es más una cuestión de habito que de otras cosas, justo como aquel que toma café antes de dormir y se van a la cama a dormir sin ninguna complicación frente a aquellos que no lo toman porque no duermen por días.

En todo caso y para evitar posibles efectos secundarios, se aconseja hacer ejercicio como mínimo unas 2 horas antes de ir a dormir y aún más si realizas ejercicios de alta intensidad e impacto. Muchos expertos lo que recomiendan es alargar la hora estiramiento, acompañándola incluso de alguna bebida o un masaje relajante, cualquier actividad propia de una tarde de spa después del ejercicio que te ayude a conciliar el sueño.

Si estas buscando una practica con movimiento para antes de ir a dormir, la practica de yoga con respiración controlada es buenísimo y si tienes pareja, porque no disfrutar de un momento de intimidad que involucre todo el cuerpo (tu sabes a lo que me refiero) que mucho ayuda también a liberar las cargas físicas dejando al cuerpo en un máximo estado de relajación. Todas las opciones son buenas y muy saludables.

Así que ya sabes, el ejercicio y el dormir se llevan muy bien juntos y llevándolos al lado uno con el otro, es todavía mejor para tu salud y bienestar.

Te invitamos a leer nuestro articulo sobre: Efectos de dejar de consumir bebidas azucaradas en el cuerpo.