Edward Mordrake: La interesante historia del hombre que nació con dos caras.

En la vida existen muchas cosas interesantes que captan la atención de las personas y no siempre esto es para bien, como lo es en la historia que vamos a mencionar el día de hoy en la que la historia de un hombre con una condición médica fue llevado a un extremo tan terrible que terminó afectando gravemente su vida. Hablamos sobre Edward Mordrake y el mito que se desarrollo alrededor de su existencia como un hombre que extrañamente nació con dos caras.

Mucho se ha especulado alrededor de la historia de Edward Mordrake y su extraña condición que le hizo nacer con dos rostros debido a una malformación congénita la cual ha sido llamada por la comunidad científica como Diprosopia. Esto hace que la historia que se desarrollo alrededor de este hombre sea tan curiosa así como trágica en la que una persona trataba de sobrellevar su condición de la forma más normal posible y no se le permitió, sobretodo por la época en la que sucedió, en la que todo lo que se salía de lo comúnmente visto era algo motivo de algarabía. A continuación descubrirás de que se trató.

La malformación congénita que le dio a Edward 2 caras, literalmente.

La Diprosopia es una enfermedad que produce la duplicación de la Notcorda, un cartílago embrionario que se produce durante el desarrollo de todos los vertebrados. Sucede que con la multiplicación de este, se genera que se desarrollen dos crestas nerviosas que terminan convirtiéndose en dos cráneos. Esta condición médica se diferencia de la de los siameses unidos por el hecho de que esta enfermedad no es consecuencia de la fusión o separación incompleta de dos embriones, sino más bien de una anomalía en una proteína que marca el patrón craneofacial normal.

Dependiendo del nivel de alteración que se sufra, el individuo puede llegar a desarrollar múltiples ojos, orejas, narices o labios. Mordrake sufría de esto, sin embargo el era una persona normal, su rostro sano no tenía ninguna alteración y era capaz de realizar su vida con total normalidad, llevando a cabo sus tareas sin problema alguno, pues su segundo rostro estaba ubicado en la parte de atrás y este no representaba ningún peligro o inconveniente para su salud más que el hecho de que pudiera acomplejarle.

El inicio de un mito que afecto su vida para siempre.

La historia y mito sobre la vida de Mordrake inició a finales del siglo XIX, cuando un periodista representante del diario Boston Post escribió sobre el. Ese fue el detonante de un buen número de historias, la mayoría basada en mentiras, que empezó a acrecentarse y como toda historia perfectamente cuestionable, esta empezó a viralizarse hasta que la verdad sobre la historia quedara oculta bajo una montaña de especulaciones sacadas de contexto, algo muy similar a lo que sucede con las noticias en Internet hoy en día.

El enorme escándalo alrededor de lo que sucedió con Mordrake llegó llegó tal punto que ahora es bien difícil afirmar si la historia sobre el personaje es real o si de verdad este existió. Si acaso este solo fue producto de la imaginación sensacionalista que invadía aquella época. Edward fue llamado monstruo, fenómeno, aberración de la naturaleza e incluso demonio, todo lo anterior fue esparcido por los distintos lugares a donde la noticia fue capaz de llegar en Inglaterra, de donde era originario. Se dice que el hombre era miembro de una de las familias más acaudaladas del país, por lo que su condición de blanco burgués le puso en el ojo de público para ser señalado al más mínimo detalle.

Edward Mordrake fue objeto de cuanta burla, chanza y amenaza le fuera posible recibir y eso alimento el miedo que se produjo a su alrededor. Decían que su rostro inerte era capaz de moverse y tenía vida propia, también se dio que su otro rostro no era más más su alter ego queriendo hacer acto de aparición para arruinar su vida, ordenándole a hacer cosas malas y escalofriantes. Edward estuvo condenado hasta el fin de sus días a sufrir el abuso, el acoso y el sufrimiento de estar atado a un “demonio” por el cual fue tachado de bestia inculta que merecía la muerte. Una especie de odio y miedo había a su alrededor cuando simplemente fue un hombre que nació con un detalle de más que no debía interferir de ninguna forma con su vida.

Al ser una historia de la cual no se puede aseverar su realidad, no se conoce mucha información exacta sobre él, como su fecha de nacimiento real, familia, ocupación o fecha de muerte. Seguirá siendo un mito que quedará para la posteridad. ¿Habías escuchado sobre Edward Mordrake? Déjanos saber tu opinión en la sección de comentarios.

Te invitamos a leer nuestro artículo sobre El Flautista de Hamelín.