La naturaleza es tan maravillosa que en ella podemos encontrar piedras, gemas y otros elementos que fungen a la perfección como un elemento natural que nos protege de muchas cosas. Pero en este caso hablaremos de uno que podemos hacer nosotros mismos.
La Orgonita la podemos armar nosotros mismos al mezclar varios compuestos que incluyen resina, pequeñas láminas, piezas o virutas de metal y en particular uno o varios pedazos de cuarzo que lo complemente, sino lo lleva no funciona.
Fue inventado y patentado al parecer por una persona llamada Karl Hans Welz a inicios de los años 90 y desde entonces su creación se ha ido modificando y cambiando de acuerdo a los gustos y las necesidades de las personas. La formula recomendada para hacerlo resulta en 50/50, alguna resina, así como algunas piezas finas de cualquier metal que no sea plomo y finalmente colocar en el centro de esta mezcla, una o varias pequeñas piezas de algún cuarzo que sea claro, puede ser blanco, rosa o azul.
Se puede hacer de cualquier forma, pero la más popular es la de pirámide, ya sea grande o pequeña ya que también los hay de diferentes tamaños, pero no necesariamente debe tener esa forma, ya que también los hay en forma circular o rectangular y hasta en forma de estrella. El punto es encontrar tanto los materiales como el diseño que más desee la persona y que sobre todo que considere en su interior que es el más ideal para crear un amuleto que cumpla con sus necesidades.
Pues como siempre, a veces somos sensibles y capaces de sentir cuando el ambiente de un lugar se carga de pesadez o negatividad que nos hace daño, podemos despertar con dolor de cabeza, cansancio todo el día, anímicamente nos sentimos decaídos, como si una pequeña nube negra estuviera sobre nosotros.
Por eso hay piedras, y en este caso la creada por los humanos, orgonita, que fungen como un remedio ideal para contrarrestar cualquier energía toxica o negativa que está en nuestro entorno. Principalmente depurar energías negativas y convertirlas en positivas. La Orgonita saca su fuerza de mezclar el cuarzo que incluimos en su interior con la mezcla de metales que incluimos también, encapsulados en el molde de resina, formando un elemento compacto que va a interactuar con nuestra energía.
El cuarzo tiene la capacidad de producir cierta vibración o energía, cuando es sometido a una presión, al mezclarlo con las piezas de metal que elegimos agregar, entonces es capaz de actuar como un elemento electro modulador. El cuarzo sólo puede emitir ondas, vibraciones y pulsos positivos, en pocas palabras, una energía ordenada y agradable.
Entonces el cuarzo comprimido por la resina genera un flujo de electrones que se suman a una onda vital, convirtiéndola en una onda sanadora y positiva que nos va protegiendo y depurando cualquier negatividad alrededor. Se cree que también ayuda a reducir las radiaciones perjudiciales que nos rodean por todos lados, como los campos electromagnéticos que emiten el WiFi de Internet, el cableado eléctrico, celulares, computadoras y electrodomésticos.
Así que, si prefieres tu propio amuleto contra las energías negativas, la Orgonita es lo mejor y mas indicado para ti, para que funcione aparte de estar bien hecha, debes portarla contigo. Así como tener otras en lugares como la sala de tu casa, oficina o negocio, lugares donde las personas estén en contacto constante.
Así es que tener tu propia Orgonita te ayudará a tener un ambiente más limpio, saludable y cargado de una energía positiva. Algo que se necesita mucho en este tiempo.
Para hacer una orgonita necesitarás los siguientes materiales:
Instrucciones:
Nota: Las orgonitas se usan en la teoría del orgon para mejorar la salud y el bienestar, pero estas afirmaciones no están respaldadas por evidencia científica.
Los cuarzos son minerales compuestos de silicato de dióxido de silicio y se han utilizado en la teoría de la curación y la meditación desde hace mucho tiempo. Cada tipo de cuarzo se cree que tiene propiedades únicas y puede ayudar a equilibrar los chakras, aliviar el estrés y la ansiedad, y promover la claridad mental. Sin embargo, estas afirmaciones no están respaldadas por evidencia científica y deben considerarse como supersticiones o creencias personales.
En la teoría de la curación con cuarzos, se cree que la estructura cristalina del cuarzo amplifica y transmite la energía, lo que permite que el usuario se conecte con sus intenciones y deseos. Sin embargo, esta teoría no está respaldada por evidencia científica y no existe prueba de que los cuarzos tengan propiedades curativas o espirituales.
En última instancia, la efectividad de los cuarzos depende de la percepción y creencia individual de cada persona. Si una persona cree que los cuarzos tienen propiedades curativas o espirituales y les ayudan a sentirse mejor, entonces pueden ser efectivos para ellos.
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