Niñas forzadas a ser niños.
Pero para Mangal ser el niño de su familia no solo significa vestirse y actuar como niño sino que es más que todo asumir el rol del varón que la familia necesita, incluyendo los trabajos tradicionales de los varones de la casa en Afganistán como ser alimentar el ganado, cargar leña, acarrear agua a la granja de trigo y ayudar a su padre con los productos lácteos que obtienen de su ganado. No tiene oportunidad de hablar mucho ya que las tareas a realizar son demasiadas, apenas le alcanza para cumplir su rol de ser el otro “hombre de la familia”.
Ahora, Mangal forma parte de los miles de Bacha Posh que existen en Afganistán, este nombre significa Vestido de Niño. Estas niñas no podrán exhibir nunca más su cabello largo, si está creciendo demasiado deberán esconderlo bajo un sombrero de lana, usaran siempre pantalones y chaquetas más grandes que su talla, su vida será así hasta que llegue a la pubertad o nazca un varón en su familia. Por lo general sus padres suelen estar felices con la decisión de tener un Bacha Posh en su hogar y la mayor parte del tiempo pues no les queda de otra.
Una tradición milenaria.
En un país que posee una sociedad profundamente patriarcal y en extremo machista como lo la de Afganistán, una familia se considera incompleta sin la existencia de un hijo varón en ella y a lo anterior mencionado se suma el hecho de que existen una creencia que indica que una familia recibe buena fortuna si existe un Bacha Posh en ella y cambia la suerte de la familia para que el próximo bebé que nazca en ella sea un niño.
Desafortunadamente, estas creencias y tradiciones solo ponen en evidencia la discriminación que sufre el género femenino en Afganistán desde el momento en el que nacen, porque no existen ni existirán registros de familias afganas que conviertan en niñas a sus varones, solo el caso contrario. Además, la preferencia de tener hijos varones radica en el hecho de que es más práctico para las familias tener hombres que mujeres, ya que estos trabajan más arduamente en el campo y su trabajo es mejor remunerado, también tienen la libertad de ir y venir a su antojo que las mujeres no poseen.
Para las niñas en Afganistán las tareas están totalmente destinadas al hogar y sus quehaceres domésticos, deben ser recatadas y totalmente sumisas. Así que la vida para una mujer no es nada fácil en este país y mayormente si esta es una Bacha Posh. ¿Qué opinas de esta noticia? Déjanos saber tu opinión en la sección de comentarios.
Deja una respuesta