Seguramente en más de alguna ocasión escuchaste o leíste la noticia de que alguna mujer dio a luz mientras se encontraba en pleno vuelo hacia un destino escogido, como el caso sucedido en el año 2020 en el que una mujer dio a luz a su bebé mientras se encontraba volando de la Ciudad de El Cairo, Egipto, hacia Londres, Inglaterra. Por cosas del destino su parto se adelanto y al encontrarse por los aires y no resistir hasta aterrizar, su parto debió ser atendido en pleno vuelo y su bebe nació en un punto de vuelo entre las ciudades mencionadas.
Es muy poco usual que un bebé nazca en un avión y para evitar que esto suceda casi siempre se debe contar con la autorización de un médico que le permita volar, casi siempre es solamente por debajo de las 28 semanas y totalmente prohibido desde las 36 semanas, pero en algunas ocasiones es una situación que se escapa de las manos y simplemente no puede evitarse. Por lo que hasta este momento, no hay una regla universal que se aplique en estos casos.
Ante esto surge la gran pregunta:
Una pregunta muy lógica y para la cual daremos explicación en los próximos párrafos. Como ya mencionamos anteriormente, aún no hay una regla universal que indique que hacer en estos casos pero la mayoría de los países recurren a las siguientes condiciones:
Aunque las aerolíneas a nivel legal se denominan territorio ficticio. También se pueden aplicar ciertas opciones como la que aplica Estados Unidos, en la que cualquier bebé que nazca en territorio o espacio aéreo de Estados Unidos, automáticamente recibe la ciudadanía norteamericana, pues así lo establece su legislación.
Esta norma cambia si se trata del espacio aéreo de muchos países de el continente europeo, en los que aplican el IUS SANGUINIS o derecho por sangre que hace que el recién nacido tenga la nacionalidad de los progenitores. Pero en esto, básicamente existen 2 principios, el Ius Sanguinis o derecho por sangre y el Ius Soli o derecho de suelo y si no se llega a un acuerdo, el bebé en cuestión quedará Apátrida, osea que nació sin una nacionalidad de ningún tipo.
Se estima que hay un aproximado de 12 millones de apátridas regados por todo el mundo, como es el caso de los que nacen en aviones en pleno vuelo o barcos en alta mar y se debe deliberar para ver que nacionalidad toman estas personas, si por Ius Sanguinis o Ius Soli, aunque muchos de estos se quedan sin nacionalidad por no poder llegar a una decisión.
¿Conocías sobre estos datos tan interesantes sobre las nacionalidades aéreas? Déjanos tu opinión en la sección de los comentarios.
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