El hilo dental o como también es conocido, seda dental, este compuesto por delgados filamentos de plástico o nylon y también puede estar protegido por una capa de cera. Este es sumamente importante para tener una adecuada salud dental, tristemente no es un implemento que suele formar parte de la limpieza diaria para la mayoría en el mundo, bien por cultura o desinformación, así que aquí te mostramos lo importante que es esto en la limpieza dental.
Tipos de hilo o seda dental.
Existen 2 tipos de hilos o sedas dentales que son muy diferentes entre sí.
-Muchos filamentos.
-Puede o no ser encerado.
-Tiene sabores diferentes.
-Se puede romper, despedazar o irse deshilachando al pasar por puntos de contacto apretados entre dientes.
-Un solo filamento muy fino.
-Puede ser más caro.
-Es encerado, suave y protege de daños a las encías al pasarlo por ellas.
-Mejor deslizamiento entre dientes.
-Generalmente no se deshilacha.
De todas formas, ante el uso correcto del hilo o seda dental, ambas opciones son eficaces para prevenir y cuidar tu salud oral.
Beneficios del uso del hilo o seda dental.
¡Cómo usar el hilo o seda dental!
Se debe sacar del contenedor y cortar unos 40 a 45 centímetros de hilo dental, enrollar la mayor parte de las extremidades en cada dedo, anular o al medio, de cada mano, dejando unos 3 a 5cm de hilo dental para pasar por el medio de los dientes. Pasa el hilo o seda de arriba a abajo, frotando el borde de cada diente para remover la placa bacteriana y los restos de alimentos.
En lo más posible, llegue a la parte más profunda de la línea de la encía para no llevar a cortar o dañar el tejido gingival. Va reemplazando el hilo al ir avanzando entre cada diente.
Para una correcta higiene, se recomienda hacer el uso del hilo dental 2 veces por día, especialmente antes de ir a dormir.
¿Haces uso de este importante implemento en tu limpieza dental?
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